Para obtener lo mejor de cualquier buen vino, y Ribera del Duero es un gran ejemplo, es importante almacenarlo correctamente y que se sirva a la temperatura correcta. Puede que no sea necesario invertir en armarios de almacenamiento y dispositivos elaborados: el sentido comúns menudo es suficientes para garantizar que los vinos se disfruten al máximo.
RECOMENDACIONES:
Si un vino se almacena incorrectamente, puede afectar el sabor y, en casos graves, el vino se volverá defectuoso. Deben observarse los siguientes puntos generales al almacenar vino:
- Para el almacenamiento a largo plazo, la temperatura de todos los vinos debe ser baja y constante, preferiblemente entre 10 ° C y 15 ° C, ya que los extremos de frío y calor pueden causar daños. Uno de los peores lugares para el almacenamiento a largo plazo es en la cocina, debido a las grandes fluctuaciones de temperatura. Los períodos prolongados de refrigeración pueden hacer que los corchos se endurezcan y pierdan su elasticidad, con el resultado de que el sello falla y el aire puede atacar el vino y genera problemas de envejecimiento prematuro, oxidaciones etc…
- Almacene el vino que esté tapado con un corcho en posición horizontal para asegurar que el corcho permanezca en contacto con el vino. Si el corcho se seca, puede dejar entrar aire, y el aire oxidará el vino. Los vinos sellados con un tapón de rosca pueden almacenarse de pie sin ningún riesgo. En el caso de los vinos espumosos, de deben guardar en posición vertical. El Co2+%+pH deterioran el tapón de corcho y por ello no conviene que estén en contacto directo con el mismo.
- Mantenga los vinos alejados de la luz directa. La luz solar natural o la luz artificial calentarán el vino y lo alterará antes de tiempo. La luz artificial puede causar sabores desagradables en algunos vinos.
- Mantenga el vino alejado de las vibraciones, para que no se altere.
Y ya sabes, almacenar bien el vino hoy nos garantiza la mejor experiencia mañana.
Buenas ideas para el almacenamiento de vino en lugares poco comunes.
UN PASO MÁS: LA VINOTECA
Los enfriadores de vino son, en general, unidades independientes fundamentales destinadas a mantener una temperatura constante. En ocasiones, puede ser interesante disponer de una adecuada para servir en lugar de almacenar a largo plazo. Este es el caso de los restaurantes, que usan estas unidades para aclimatar el vino antes de ser servido.
Una nevera para vinos o también llamada vinoteca se diferencia significativamente de las neveras convencionales que se pueden encontrar en cualquier cocina. Los rangos de temperatura son distintos, la puerta suele ser de cristal para permitir ver su interior, y los sistemas de enfriamiento, tienen vibraciones limitadas
4 ASPECTOS A CONSIDERAR:
- Sitio y tamaño: antes de entrar en consideraciones técnicas, deberías considerar cuántas botellas quieres almacenar y dónde vas a colocar finalmente la vinoteca. ¿Debería instalarse como nevera incorporada en un bar o cocina pequeña, o debería ser un modelo independiente? Como parte de esta decisión, también debes tener en cuenta en qué dirección se abre la puerta de la nevera.
- Clase climática: para asegurar que la vinoteca siempre refrigera de forma fiable, la temperatura ambiente también es importante. La clase climática de una vinoteca indica en que temperatura ambiente el aparato puede refrigerar su contenido.
- Gama de funciones: el aspecto más esencial es la gama de funciones. ¿Necesitas una refrigeración de 2 zonas? ¿O solo sueles beber un tipo de vino y una sola zona es suficiente? Asegúrate también de que la nevera para vinos protege tu valioso contenido de la radiación ultravioleta y perturbaciones. Es especialmente importante que pueda ajustar la humedad y la temperatura con exactitud de acuerdo con tus deseos y necesidades. Para este fin, la nevera para vinos debería contar con un termómetro para poder medir la temperatura y un medidor de humedad (higrómetro).
- Coste y consumo: un último pero importante factor es el coste de tener una vinoteca. Además del desembolso inicial, hay costes continuados por el consumo de energía del aparato. Cuanto mejor sea la categoría de eficiencia energética, menor será el consumo energético anual.
