Hace unas pocas semanas, a finales del mes de mayo, vivimos en la Ribera del Duero la mayor granizada que recordamos los aquí presentes. Fue algo sin precedentes. Se estima que causó daños en dos mil hectáreas de de cepas acogidas a la DO (el 10% del total del viñedo). Una tormenta que descargó más de 40 litros en sólo 15 minutos y que arrasó cultivos en una veintena de municipios, es su mayoría de las provincias de Valladolid y Burgos. Hoy comentamos cómo actuar tras la caída de granizo en el viñedo.
El tiempo es, y seguirá siendo siempre, ese factor imprescindible que nos da y nos quita todo en un abrir y cerrar de ojos.
¿Cómo afecta el granizo al viñedo?
Una tormenta de granizo arranca los pámpanos, hojas y racimos dejando importantes heridas en la vegetación y en muchos casos haciendo que toda la cosecha de ese año se pierda.
Las primeras 24 horas tras la granizada son cruciales para determinar daños y evaluar acciones y decisiones. Dependiendo de la virulencia con la que ha caído el granizo deberemos optar por diferentes trabajos.
Si el granizo caído nos ha dejado unas pocas hojas y racimos lo recomendable es, en menos de 48 horas, realizar un tratamiento con un producto cicatrizante a base de productos naturales y ecológicos y no tomar ninguna otra medida especial en esas primeras horas. No tocar más la planta. Hay que dejar que el viñedo vaya reparándose por sus métodos naturales y en cuanto se pueda acceder al terreno realizar los tratamientos necesarios. Es recomendable realizar los tratamientos habituales del viñedo, pero sobre todo es crucial prestar atención al posible riesgo de enfermedades por humedad y atender a los tratamientos contra hongos como el oidio, mildiu o botritis que encontraremos por las condiciones de humedad y temperatura.
Si la intensidad del granizo caído no ha dejado vegetación ni racimos, se recomienda hacer una poda de invierno para mantener la estructura de yemas de la planta y trabajar en mejorar la cosecha del año siguiente.
En Tres Piedras, para predecir posibles acontecimientos y tomar decisiones de manera más certera trabajamos con una red de estaciones meteorológicas instaladas en nuestros viñedos de Ribera del Duero. Entre otros aspectos controlamos la humedad relativa y temperatura ambiental, para prevenir posibles afecciones de hongos como el oidio y el mildiu. Para el cultivo ecológico de Tres Piedras, trabajar con tecnología meteorológica (de Sencrop) es muy importante ya que nos permite realizar los trabajos en el momento necesario y exacto sin tener que usar productos agresivos. Además todos los datos que nos marca esta estación los compartimos con otros usuarios (agricultores) para que se puedan beneficiar de esta información a escala regional, no sólo a escala de la parcela de viñedo de cada viticultor. Esto lo contamos hace unos pocos días en el programa Surcos de la televisión local de Castilla y León (podéis ver el reportaje a partir del minuto 12 pinchando aquí).