Creemos en el equilibrio de la naturaleza, en aprender a escucharla e intentar comprender qué nos dice en cada uno de sus gestos. Es así como entendemos que de una buena uva nace un buen vino, a raíz de una viticultura regenerativa.
«No heredamos la tierra de nuestros antepasados, la tomamos prestada de nuestros hijos”. Esa maravillosa cita de Antoine de Saint-Exupéry (El Principito) siempre nos ha hecho reflexionar.
En Tres Piedras trabajamos con los recursos que nos brinda nuestro entorno, respetando siempre la biodiversidad que alberga la zona.
Nuestra filosofía y valores se cimientan en trabajar la tierra a mano, realizando una agricultura ecológica, sostenible, sin la utilización de pesticidas, fungicidas o fertilizantes químicos.
Desde que iniciamos el proyecto en 2007 nos hemos sentido cautivados por la tierra, por su fuerza y energía. Admiramos su sabiduría y por eso respetamos sus tiempos y sus ciclos vitales. Nuestra máxima es vivir en armonía a través de la Tierra, el Trabajo y el Tiempo, las tres bases de Tres Piedras.
Practicando una viticultura regenerativa cambiamos la manera de relacionarnos con la tierra. Esto nos permite dejar de perder, en un año, la misma cantidad de suelo fértil que la naturaleza tardaría más de 300 años en generar. Construimos suelo vivo. El vínculo entre viña y biodiversidad en este sentido es cada vez mayor.
Nuestro compromiso es el de regenerar la tierra, el de dejarla viva para las generaciones que vendrán, obteniendo a su vez una mejora de la producción y unos vinos de mayor calidad.
